Tema : «Mavilloso» por Alberto Cifuentes Avello

Por Alberto Cifuentes Avello

Profesor

Estoy observando que el mundo en general cree mucho más en el Viejito Pascuero que en un Ser Superior, porque moros y cristianos favorecen su adoración activándose en las casas comerciales grandes o pequeñas, buscando algo que permita, en nombre de este viejito fraternizar en la familia y/o en las amistades más cercanas.

Bueno, en lo práctico y lo más real posible y muchos ya lo saben, esta celebración que incluye tener un pino adornado, tiene muchos años de celebración y en lo más real concuerda con el solsticio de invierno que ocurre en Europa y que con sus migraciones a América, han traído esta especial celebración, con la diferencia que aquí es en el solsticio de verano.

Se dá el caso de ver aún, pinos que entre sus adornos cuenta con pequeñas motas de nieve, cosa que en los países sudamericanos en los solsticio de verano no existe, al contrario, son días en donde junto con los pavos asados, también, nosotros debemos soportar la temperatura elevada que el Ser Superior, es decir el Dios de Kenathon nos entrega.

Bueno, pero entendiendo el enorme simbolismo que encierra este solsticio de verano, podemos atisbar que son días de mucha imaginación y de sueños en donde se entremezclan aquellos de los niños y de los grandes, en torno a la Navidad.

Son momentos en donde todos desean “paz y felicidad” para los otros todos y se hacen regalos, previa visita a los ayudantes del viejo pascuero y que cobran por ese trabajo de tener diferentes obsequios y que incluso, en un gesto extraordinario de solidaridad, se pueden pagar en cuotas que a veces alcanzan más allá de la próxima Navidad.

Bien y aquí toco el punto de lo maravilloso que son estos días, en el sentido que el ser humano en su magnánima bondad en este caminar en su desarrollo hacia siempre un futuro mejor, va construyendo caminos en donde por este tan especial sentimiento humano, va dejando en el camino con muchos que son destruidos en encuentros de guerras interminables o creando pobrezas insuperables entre muchas generaciones.

Uno ve a los animales, que se dice no tienen razón y sin embargo, son capaces de gestos extraordinarios de protección de su particular especies y muchas veces en favor de otras para un bien de supervivencia en la vida que ellos pueden llevar.

Por su parte el ser humano, que vive bajo distintas religiones o en entidades políticas humanistas que, a su modo, apuntan a un bien, van continuamente creando enormes charcos de sangre, pero especialmente manteniéndose en la ignorancia.

Esto es donde nos hace ver cómo es posible que un ser especial de este planeta, único ser pensante en el universo conocido, se destruye a sí mismo, se mutila en su propio pensar, vive en la burbuja de cómo ser más que el otro.

Como es posible, que existan enormes empresas de guerras apoyadas por accionistas y que cada vez que hay un deterioro mundial, sea motivo de un mayor enriquecimiento por el aumento en el valor de las acciones.

Como es posible, que cada vez, a través de la educación formal se vaya construyendo robots humanos que sirvan a intereses y capaces de ser parte de una cadena de producción y al mismo tiempo consumidores.

Pero lo más extraordinario, es la capacidad de construir artefactos, equipos y otros capaces de reemplazarlo incluso en el pensar. Ahí están en el celular, esas IA contestando cualquier barbaridad que se les consulte.

Por todo eso y lo hago en un pensamiento reflexivo, el hombre es un ser maravilloso con capacidades de actuar como robots, con capacidad de ignorar al otro, de matarlo incluso, pero al mismo tiempo de adorar a un ser superior desde que nace en un pesebre, curiosamente en un establo. Es decir, es capaz de crear un ser imaginario desde que nace, producto de un gesto, que hoy implicaría llevar a la cárcel al creador por abuso de una menor y que después lo ensalza por haber muerto por todos.

Bueno, pero nos queda el verlo feliz, en estos días y en el mismo marco, crear maravillosas obras musicales y producir encuentros de intimidad familiar.

Buscando lo último, es meritorio desear que el Viejito Pascuero nos traiga salud y energías para acometer en la mejor forma al nuevo año, en este caso el 2026.

A todos quienes, me leen, el agradecimiento por ese especial gesto para conmigo, muchas gracias. Feliz Navidad y mucho éxito en el 2026.